Egdar Arcano, representante de uno de esos partidos venidos a menos en la ciudad, como lo es Primero Justicia, cree tener la suficiente moral para criticar a nuestro Alcalde y a su equipo de trabajo. Efectivamente, el autollamado “justiciero” se ha dado a la tarea de usar las redes sociales para soltar cualquier tipo de sandeces e improperios, como lamentablemente se ha venido haciendo costumbre por parte de unos tantos opositores porteños, contra todas las actuaciones de la gestión encabezada por Rafael Lacava. Intentando tapar el sol con un dedo.
Vamos a ver. A través de su cuenta Twitter este cibernauta ha intentado mal poner -con afirmaciones irresponsables y carentes de sentido- al alcalde Lacava. No contento con ello, además apunta contra quienes, desde el inicio de su mandato, le hemos venido acompañando en esa noble aspiración como es la de luchar por mejorar los destinos de este pedacito de cielo.
Los comentarios desfasados del supuesto “justiciero” no nos generan ningún picor porque hemos dado muestras palpables del compromiso que tenemos con este pueblo. Sin embargo, es propicio recordar una cuantas cosas a quienes creen que por decir algunas estupideces en 140 caracteres se consagran como líderes dignos de admirar. Nada más lejos de la realidad.
Quienes pretenden presentarse como una opción política para la ciudad son esos mismos quienes durante la campaña de sus candidatos “dedocráticos” estuvieron ofreciendo villas y Castillas por dondequiera que pasaban. Ahora bien, como ya terminó su pan y circo -o sea la campaña interna- inmediatamente se olvidan de las calles. Solo les importa atraer la atención de la gente para el voto y después practicar aquello de “si te he visto no me acuerdo”. Es la política del preservativo.
Mi pregunta es: ¿cuántos miembros de su partido se abocaron a atender las comunidades ante la calamidad del agua que nos tocó vivir recientemente? ¿A cuántos de ellos vimos en los barrios tratando de dar algún aporte? ¿Cuántas zonas populares visitaron para siquiera intentar mitigar personalmente la tragedia padecida por este pueblo? Ninguno. Su idea acerca del significado de la labor de la oposición es negar todo lo que plantee la revolución. Y por supuesto, el chisme por Twitter. Por eso Primero Justicia no llega al cinco por ciento (5%) de respaldo en las encuestas que se hacen en el municipio.
Los revolucionarios aprendimos de Chávez a aceptar la crítica. Siempre y cuando venga acompañada de propuestas tangibles. Invito a este señor a salir un poco de su mundo virtual. Vámonos juntos a conocer la opinión de la mayoría de los porteños. Para ver si es que alguien lo reconoce. Para ver a quién representa. Seamos responsables, por favor, al momento de emitir alguna opinión. No es con majaderías como se va a taladrar el respaldo popular que tiene Rafael Lacava. Tampoco así se va a resquebrajar la unidad que gira en torno a Rafael. Quienes así lo piensan están destinados a tirarse por un barranco. Mejor dicho, a morir en el Twitter.
NO rotundo a las invasiones
No podemos permitir que nadie venga a invadir tierras en el municipio. Ya sea por intenciones particulares o por negocios. Y mucho menos que nos digan “como vienen elecciones se la tienen que calar”. NO. Quiero dar como ejemplo lo sucedido entre Cumboto II y Las Corinas. Ese corredor vial fue invadido, sabiendo la cantidad de negocios que hay por allí. Sin importarles a otros la consecuencia de estar a la orilla del canal de San Esteban, o bajo torres de alta tensión. Si pensaran realmente en sus hijos, se darían cuenta de que ese remedio es peor que la enfermedad.
Estamos conscientes de la necesidad habitacional. El Gobierno Nacional así lo entiende. La Misión Vivienda es ejemplo del gran esfuerzo realizado en esta materia. Por lo tanto, pido seamos más pacientes y busquemos otras formas y soluciones. En el caso del sector Taborda, ubicado prácticamente a la entrada a la ciudad, se pretende causar el mismo problema y después ¿quién responde por los servicios con los que debe contar un desarrollo habitacional? ¿Qué creen que opinan los visitantes? No permitamos a quienes solo piensan de manera individual hacer comercio con las aspiraciones naturales de todo un pueblo.
¿Sabían ustedes que, según lo dispuesto en el artículo 80 de la Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y Hábitat, “toda aquella persona que haya invadido u ocupado de manera ilegal terrenos públicos o privados, inmuebles, o bienhechurías ajenas, no gozará de los beneficios previstos en la ley, ni podrá formalizar en ningún caso la propiedad de las viviendas o terrenos ocupados ilegalmente”?
Es necesario, una vez más, hacer el llamado de conciencia a los porteños y porteñas. Las invasiones representan un grave problema para el municipio, pues no arreglamos el problema ocupando terrenos los cuales no se encuentran aptos para habitar. Pero al mismo tiempo, más allá de esta crítica, quiero hacer una reflexión dirigida a la burocracia. La Misión Vivienda debe seguir respondiendo con soluciones dignas para todos aquellos desasistidos. Tal cual como lo avizoró el comandante supremo.
¡Chávez vive! ¡Lacava sigue!
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@AlexfaustinoS
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